El director del Bolshoi, interrogado en el hospital tras ser atacado con ácido

Las autoridades rusas han dado permiso a los investigadores para interrogar en su habitación del hospital al director artístico del Teatro Bolshoi en Rusia, Sergei Filin, quien se recupera de un ataque con ácido que le fue arrojado a la cara cuando se disponía a entrar en su apartamento.

Por el momento, ni el Ministerio del Interior ni el equipo encargado de la investigación han hecho declaraciones sobre el estado de las pesquisas, que se están llevando a cabo en el interior del teatro, si bien todo apunta a una agresión ligada a la actividad profesional de la víctima.

El bailarín, que sufre quemaduras de tercer grado en la cara y el cuello y podría perder la vista, se encuentra en planta después de someterse el viernes a una intervención quirúrgica en los ojos. "No ha habido complicaciones, el paciente no tiene dolores y ha regresado a su habitación", explicó el doctor Alexandre Mtitchkine. El médico ha dicho que, de momento, es pronto para hacer un pronóstico sobre si sufrirá secuelas en la vista.

Una llegada polémica

Filin, de 43 años y ex estrella del ballet ruso, accedió a su cargo en marzo de 2011 entre críticas por su nombramiento. En los meses previos a este ataque, había recibido varias amenazas telefónicas e incluso las ruedas de su coche habían sido rajadas y su página de Facebook 'hackeada'.

Los cambios en la programación habían levantado críticas en su entorno. Así, dos de las estrellas del ballet, Natalia Osipova e Ivan Vasiliev, renunciaron a sus puestos como protesta al nuevo repertorio del Bolshoi. Asimismo, el director ejecutivo del teatro, Anatoly Iksanov, acusó a Filin de "no estar comprometido" con su estilo de dirección.

"Estoy consternado por este acto bárbaro, que no debería ocurrir en una sociedad cívica", ha dicho el coreógrafo español Nacho Duato, que dirige el ballet de San Petersburgo. De forma similar se ha expresado el coreógrafo John Neumeier, director de la compañía de ballet de Hamburgo. "Un ataque así en el mundo del ballet, que se basa en la armonía y la belleza, me conmociona y para mí es inimaginable que alguien sea capaz de hacer eso". "Yo ya viví abismos en el Bolshoi", ha subrayado la que fuera bailarina de la compañía Anastassiya Volotshkowa. El mundo del ballet es "despiadado".

El cargo de Filin está considerado uno de los más influyentes dentro del mundo de la danza clásica y por ello es también uno de los más codiciados. El bailarín, nacido en Moscú, está considerado como uno de los mejores del mundo. "He pedido al fiscal general Yuri Tshaika que asuma el caso personalmente. El ataque a Serguei Filin es un crimen horrible", ha reconocido el ministro de Cultura ruso, Vladimir Medinski.

La historia del teatro Bolshoi se remonta a hace 200 años. En 2011 se reinauguró tras seis años de trabajos de restauración en los que se ha recuperado todo su lustre de la época de los zares. El Bolshoi siempre destacó por su cultura operística y está considerado como una de las cunas del ballet, con su pulcra forma de bailar, la fuerza atlética de sus movimientos, que destacan por una estricta sincronía. La compañía cuenta con más de 200 bailarines, más que ninguna otra en el mundo.

Source: http://www.elmundo.es/elmundo/2013/01/19/cultura/1358601519.html

(via Mr. Reader)

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